Los niveles de polen de la semana del 6 al 12 de marzo empiezan a mostrar el cambio de estación que se aproxima. Hay más variedad de taxones propios de la primavera y las concentraciones de cupresáceas (ciprés) sobrepasaron los 50 granos de polen por metro cúbico el pasado sábado. El resto de taxones que mostraron niveles destacados fueron el pino (Pinus sp.) con 22 granos/m3, las ortigas (urticaceae) con 13 granos/m3 y las amarantáceas (Salsola, Chenopodium, etc.) con 10 granos/m3.
El cultivo del almendro en la provincia de Almería se remonta a la época romana, aunque no fue hasta la llegada de los árabes en el siglo VIII cuando se inició su explotación comercial. Tras la reconquista en el siglo XV, el cultivo del almendro continuó siendo una actividad económica importante, aunque no fue hasta el siglo XIX cuando se produjo un gran auge gracias a la llegada de nuevas variedades de almendro traídas desde América. En la actualidad, la provincia de Almería es uno de los principales productores de almendras de España, con una producción anual que supera las 60.000 toneladas.
Sus flores pueden variar desde el rosa pálido hasta el blanco puro. Además, tienen una estructura interesante, cada flor tiene cinco pétalos y muchos estambres, pero solo uno de esos estambres tiene polen fértil. Aunque es una planta autocompatible (puede polinizarse a sí misma), la producción de almendras se ve favorecida por la polinización cruzada, que ocurre cuando los granos de polen se transfieren a otro individuo (otro árbol) por los polinizadores. De esta forma, las almendras son de mayor tamaño y calidad porque el proceso de fecundación cruzada aumenta la diversidad genética y la variabilidad entre los individuos de la población, dando lugar a árboles más resistentes a enfermedades y adaptables a diferentes condiciones climáticas.